lunes

el miedo que tengo...

Todos los medios, con contadas excepciones, se hacen eco de la preocupación mundial por los avances que pretende llevar a cabo el gobierno de Irán en materia de energía nuclear. Parece ser que van a aumentar el enriquecimiento de uranio hasta el 20%. Lo que provoca que todo el mundo se rasge las vestiduras ante tamaño desafío a occidente.

La verdad es que a mí no me da miedo. No entiendo como todos "hemos picado" en el juego del "enemigo islámico". Es decir, sabemos que EEUU, "gobernado" por el pacificador Obama (aka: empecé siendo un cortao oscurito y voy camino de una leche manchá) e Israel ("territorio" formado por hombres adinerados con ridículos tirabuzones y mujeres con los mayores apéndices nasales vistos hasta la fecha) poseen el mayor armamento nuclear de nuestro querido planeta. Y resulta que nos da miedo que Irán pueda fabricar armas nucleares. ¿No sería lógico preocuparse primero por los que ya lo tienen?

Aunque claro, ellos son los buenos. Por un lado un país que defiende el "dispara primero y pregunta después" y otro que pretende que sintamos pena de ellos por siempre jamás (¡¡qué forma de rentabilizar un holocausto!!).

Pues nada, a preocuparse toca. No vaya a ser que nos caiga una bomba nuclear. Aunque bien visto, en Sevilla se adelantaría mucho con todo el tema de las obras del metro.

La verdad es que a mí lo que me preocupa es que el Betis suba a primera. El resto de cosas, o tiene remedio o no lo tiene. Asi que...

2 comentarios:

pasaba dijo...

la diferencia es que iran es una dictadura encubierta dirigida por un grupo de terroristas moros que han dicho que quieren borar dle mapa a paises, imaginate lo que harian con una bomba nuclear millones de muertos, y la diferencia es que israel es una democracia en toda la zona y no van diciendo de borrar del mapa aningun pais con una bomba nuuclear pero esto tu ya lo sabias y te lohas callado, se te ve el plumero defendiendo moros terroristas igual te viene de familia

Mister Bezier dijo...

Probablemente me venga de familia. ¿O será porque algunos en el instituto me llamaba "el moro"?, aunque eso probablemente también lo sepas ¿verdad?.